
Estudiantes universitarios de todo el país producen diversos insumos médicos para evitar la escasez durante la pandemia del COVID-19.
El desarrollo de la pandemia por el virus COVID-19, causó un resultado esperable: la escasez de insumos médicos. Por este motivo, varias universidades emprendieron la fabricación de productos de protección para el personal de la salud. Algunas casas de estudio comenzaron a utilizar sus impresoras 3D para fabricar máscaras de protección facial.
En este sentido, la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), entregó 700 mascarillas protectoras a 21 hospitales y centros de salud de la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires, y 200 máscaras al Hospital Garrahan.
Las mascarillas se elaboran en el Laboratorio de Impresión 3D de la institución, gracias a las donaciones de material y al trabajo voluntario de estudiantes, graduados y autoridades. La secretaria de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la UTNBA, Patricia Cibeira sostuvo: “Frente a esta pandemia, el compromiso de la universidad con la comunidad se acrecienta. Hoy tenemos más de 600 pedidos de máscaras de protección y seguimos recibiendo solicitudes”. Por otra parte, la Universidad de Ingeniería de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) articuló 89 voluntarios, docentes, investigadores, alumnos y particulares. A su vez, cuentan con 119 impresoras 3D y posee una capacidad de producción de 200 máscaras diarias. De la iniciativa, coordinada con el Ministerio de Salud bonaerense, también participan la Escuela de Aeromodelismo de La Plata y la Comunidad de Impresión 3D.
También en el sur del conurbano bonaerense, la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora (UNLZ) lleva adelante un proyecto que nuclea a más de 25 puntos de fabricación e incluye tanto a docentes, investigadores y alumnos, como a particulares con equipos propios. Los voluntarios confeccionan, desde sus domicilios, un promedio de 120 mascarillas por semana, siguiendo las indicaciones de la Cámara Argentina de Impresión 3D y Fabricaciones Digitales, para entregar un producto seguro y funcional. Desde allí proveen al Hospital de Clínicas y el Parque Industrial de Ezeiza, entre otros puntos. Otro caso es el de la Universidad Nacional del Litoral (UNL), en Santa Fe, que cuenta con 21 impresoras 3D en distintas unidades académicas. Al igual que en el caso de los respiradores, los planos son de código abierto y se pueden descargar en www.edu.edu.ar/coronavirus para usarlos sin fines de lucro. “Todavía no estamos produciendo a pleno pero estimo que vamos a poder hacer unas 200 máscaras por día. Si conseguimos más insumos, podríamos llegar a 300 o 400. Por ahora, la distribución será local más que nada, empezando por algunas instituciones que nos han pedido”, explicó el secretario de Vinculación y Transferencia Tecnológica de UNL, Javier Lottersberger
Otras universidades que también participan de distintas maneras en esta fabricación son la Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV); la Universidad Nacional de Noroeste de la Provincia de Buenos Aires (UNNOBA); la Universidad Nacional de Villa María (UNVM); la Universidad Autónoma de Entre Ríos (UADER) y la Universidad Nacional de Tres de Febrero (UNTREF). Cabe aclarar que éstas son solo algunas, ya que la mayoría de las instituciones están involucradas en este proceso, ya sea poniendo a disposición sus impresoras 3D como asesorando a emprendedores solidarios que están fabricando insumos.
(Fuente: Ministerio de Salud y Educación)
Comunicación IUNMa